MANIFIESTO DEL 17 DE MAYO: CONTRA LA HOMOFOBIA, BIFOBIA Y TRANSFOBIA
La
Historia se escribe con desobediencia. Y las activistas de Valladolid Diversa somos
herederas de una larga historia de lucha que debemos recordar con orgullo y
continuar con firmeza:
Somos
los cónsules de Sodoma. Somos Marsha en el Stonewall arrancando un parquímetro
y usándolo como ariete. Somos el Batallón Sagrado de Tebas. Somos las brigadas
arcoíris kurdas destruyendo al Estado Islámico. Somos las travestis y transexuales
de Barcelona peleando contra los grises en las Ramblas.
Por
eso conmemoramos el 17 de mayo, Día internacional contra la homofobia, bifobia
y transfobia. Por eso seguimos manifestándonos, tomando otra vez las calles,
que son y serán siempre nuestras. Por eso estamos aquí, en estos juzgados que
son el último punto de nuestro recorrido de la vergüenza: para denunciar a
todos los culpables de las desigualdades y discriminaciones que sufrimos cada
día las personas de Géneros y Sexualidades Diversas.
Para
denunciar al Partido Popular, que sigue obstaculizando por todos los medios las
leyes LGTB+ tanto a nivel estatal como en Castilla y León.
A
Hazte Oír, que después de pasear durante todo un año su mensaje de odio por
toda España, se atreve a denunciar a compañeras activistas de Asturias y pedir
prisión para ellas por el mero hecho de protestar contra quien llamaba enfermas
a las personas trans.
A
las instituciones tránsfobas y la sociedad cissexista, que empujaron al
suicidio a Ekai en febrero o a Thalía hace apenas dos semanas, dos menores
trans que cayeron víctimas de asesinatos sociales.
Al
sistema judicial, los jueces y fiscales que interpretan las leyes de una manera
machista y homófoba, que no ven delito de odio por homofobia cuando nos agreden
por la calle al grito de “maricones” o “venís de daros por el culo”, como les
ha ocurrido a nuestros compañeros Álvaro y Manu.
A
la Organización Mundial de la Salud, que sigue considerando en pleno 2018 la
transexualidad como una enfermedad mental.
A
los 72 países que hoy en día multan, persiguen o encarcelan a las personas de
Géneros y Sexualidades Diversas. A los 10 países que castigan con pena de
muerte tener relaciones con una persona de tu mismo género. Y al Gobierno de
España por no ofrecerse como país de asilo para las personas refugiadas GSD que
huyen de sus países.
A
Rusia, que aún no ha dado explicaciones ni ha cerrado el campo de concentración
para homosexuales que abrió el año pasado en Chechenia, donde siguen ocurriendo
torturas y asesinatos.
Y,
por supuesto, a la sociedad machista, homofóbica, bifóbica y transfóbica que
juzga nuestros cuerpos, nuestras vidas y nuestros deseos, que nos ataca por
atrevernos a ser libres.
Nuestros
enemigos, los GSDfóbicos, son fuertes y van ganando. En esta situación,
nosotras no podemos quedarnos de brazos cruzados mirando cómo nos arrebatan
todo lo que habíamos conseguido y nos alejan todavía más de todo lo que falta
por conseguir. Si nos empujan hacia atrás, las personas de Géneros y
Sexualidades Diversas debemos empujar con más fuerza hacia delante, debemos luchar
para vencer. Nosotras no nos rendiremos. Ésta no es la bandera blanca de la
rendición. Miradla bien. Debemos recordarlo cada vez que la veamos: ¡no es una
bandera blanca!
Estamos
muy acostumbradas a luchar. La vida de cualquier persona GSD es una vida de
lucha. Primero, de lucha interna para aceptarnos a nosotras mismas a pesar de
las ideas podridas que este sistema cis, hetero y patriarcal nos ha inculcado.
Después, de lucha para reunir la valentía necesaria para salir del armario,
mostrarnos ante el mundo tal y como como somos, de atrevernos a ser libres. Y
finalmente, de lucha por seguir adelante a pesar de la homofobia, bifobia y
transfobia que atraviesan cada ámbito de nuestras vidas.
Las
personas de Géneros y Sexualidades Diversas debemos ser valientes y luchadoras.
No por convicción, sino porque no nos queda más remedio que ser valientes y
luchadoras si queremos vivir en libertad y con dignidad. Es una gran mierda,
sí, y por ello debemos acabar con la GSDfobia, para que llegue el día en que
ninguna persona GSD se vea obligada a ser valiente ni luchadora.
· Para que nunca más un chico
asexual tenga una relación sexual no
deseada, movido por la presión social.
· Para que nunca más una chica
pansexual tenga que escuchar que su
orientación no existe, o que es una guarra que quiere follarse a todo el mundo.
· Para que nunca más una
persona de género no binario tenga
que elegir entre aguantarse las ganas de ir al baño o clasificarse dentro de un
género que no es el suyo.
· Para que nunca más una
persona intersexual sea mutilada al
nacer.
· Para que nunca más un
chico bisexual llore en el recreo
por el acoso al que le someten sus compañeros de clase.
· Para que nunca más una
chica lesbiana sufra una violación con
la excusa de “curar su desviación”,
· Para que nunca más una
pareja de chicos gays acaben en el
hospital por darse un beso en la calle.
· Para que nunca más una
niña trans se suicide porque ya no
aguanta más.
Por todas nosotras, por
todas ellas, debemos seguir luchando. ¡La lucha es el único camino!
Leave a Comment